NO CORRAS...CAMINA

El mundo está lleno de desigualdades, de distintas razas, de diferentes valores, de miles de colores...variedad; nada es igual. ¿Os habéis dado cuenta que un mismo acto o una realidad tiene miles de interpretaciones?¿Cómo puede ser que dónde yo veo una mirada triste otro sólo vea una persona?¿ Dónde yo puedo apreciar un silencio con miles de palabras otro sólo sienta vacio?
La vida es así; realidades e intrepretaciones.Gente que sólo se queda con lo que se ve; con la superfície y otras, de las cuales me incluyo, me quedo con el interior. Cómo la pintura, el frío, la lluvia, el sol...eso borra la chapa, la textura y lo que queda es lo que se esconde.
Tenía miles de ideas para escribir pero en la terraza dónde me encuentro me perdí; no que no supiera dónde me encontraba pero paré; cerré los ojos y sentí la brisa. Dulce aire en mi y soñé despierta y observé mi realidad. La prensa sólo traía fragmentos de un mundo con prisas: economía,paro, situaciones de hambruna extrema, mortalidad...y pensé: ¿ y la vida? ¿ y la luz? ¿ y ese tiempo de calma, dónde queda?
No resulta fácil detenerse cuando va todo tan rápido dónde la corriente nos puede llevar a un lugar oscuro y por eso dije: para. Detente, observa, escúchate y vuelve a caminar. No corras.

Y sigo con mi análisi. Una mujer con su café escribiendo en su ordenador a toda prisa, un señor perdido en sus pensamientos con una mirada gris, y una chica con su teléfono... y nadie habla. En la calle todos corriendo de un lado a otro sin sonrisas y lo confieso; sentí tristeza. Chica melancólica como me defino también me pierdo y puede que no sea momento de muchas alegrías pero parece que no soy la única. ¡La vida es un regalo! Pero todos corren...nadie camina.

La experiencia me da la oportunidad de decir que no vale de nada correr y no saber parar porque, al final, te arrastra la corriente y pierdes muchas cosas por tus prisas.

Si algo te hizo detenerte, te hizo caer y te derrumbaste, sentiste que tú ibas muy lento para el ritmo de la vida para y analiza. Más vale llegar más tarde que nunca llegar.

Disfruta de ese café, de esa conversación, si te dijeron adiós muéstrale a la vida que tu sonrisa será tu alianza aunque tu corazón esté triste, si te hicieron daño coge tu tiempo para curar esas heridas y, aunque haya cicatrices, siempre habrá algo que te mostrará que valió la pena sentir.Llora, ríe, grita...pero vive.

No corras porque en el camino hay miles de personas, de vivencias que no volverán y aunque no nos podemos detener aprende a caminar.

Pasos firmes en nuevos caminos por descubrir dejando que mi guia me lleve a los caminos por descubrir pero despacio, con calma, ... y siempre, apreciando los detalles de esta vida.